So not in love!

“si supieras cuanto te amo”, “no puedo respirar si no escucho tu voz”. Paralizado quede antes de que lograra quitarme su telefono y la conversación volviera a su caminar normal. Es que los gays se enamoran tanto? Estaba espantado, quizás nunca había leído una demostración de afecto tal entre dos tipos.

O a lo mejor salí defectuoso de fábrica y, seriamente, no puedo demostrar tales afectos. Por que celos puedo, esta demostrado ante rigurosos científicos hijos de afrodita. Pero en cuanto al amor endemoniado y a la evocación de Lord Byron nunca he sido bueno. El amor desde siempre he pensado, es para nerds, de lo cual tengo mucho, pero no lo suficiente.

“Creo que nunca me voy a enamorar”, así pensaba yo cuando tenía 15 años y hasta el día de hoy lo he cumplido. No ha existido tipo que remueva en mi tal grado de admiración, respeto, confianza o que me deje en un grado de aturdimiento tal, que, finalmente, no tenga otra alternativa.

Es que entiéndanme. En esta ciudad ya es difícil ser un gay decente, más aun es encontrar tu “significant other” en medio de una multitud que tiene por aspiración máxima adorar a Thalia y alucinar con un seudo show revisteril los sábados por la noche. Me aburrí de la noche vestida de travestí. Me aburrí de sus remixes orribles (horribles sin “h”, por que así dice el richy que es más feo todavía) me aburrí de los dramas adolescentes en tipos que bordean los 40, me aburrí de sus lásers de festival de viña año 1985, me aburrí de las lentejuelas y su brillo desconcertante que no deja ver mas allá, me aburrí de la falta de ideas, me aburrí de echarle la culpa a la cultura straight por no dejar crecer a los gays y dejarlos como niños por toda la eternidad. No, ahora entiendo que si no quieren crecer es por que es más cómodo viajar en una nube de maquillaje y de recuerdos ochenteros que en la triste e inculta realidad. Pero Fiona Apple lo dice mejor que yo: “'Cuz I suddenly feel like a different person, from the roots of my soul come a gentle coercion” o mejor dicho solo póngale play a “the child is gone” del disco “tidal” y estaríamos listos.

Una vez leí en una columna que si no me gustaba la “onda” donde estaba, uno tenia todo el derecho y la obligación de crear otra. Y, claro, como buen alumno e incipiente periodista me embarque en la ingrata búsqueda de una nueva (o reciclada) “onda” y todo estaba ahí. Tan cerca que casi me mareó un poco.

Había, realmente, tipos preciosos. O sea de verdad lo recomiendo, la escena rocker chilensis esta que arde. Ese día tocaban 3 bandas en el living del cine arte alameda y “barracuda” (una nueva amiga) nos invito a ver tocar a su banda “lío de faldas” bastante interesante por lo demás, desde el momento que la oí cantar me recordó a los tempranos discos de sonic youth. Junto a ella: Tio Lucho y Pornogolossina. El público fluctuaba entre chicas punk versión 2.0 (bastante más glamorosas que las antiguas, pero manteniendo la actitud. Nada de chicas gritonas ni machotas grotescas), chicos gays guapísimos (con unas onda...heavy) y uno que otro hetero disperso entre la multitud.

Restante esta decir que babee en más de una ocasión y el nico al lado me recordaba (cada vez que eso pasaba) que “ese era hetero”. Maldito! Me derrumbaba el sueño antes de empezar a soñar! lo bueno de estar en un lugar así es que todos son bellos, todos son jóvenes y todos profundamente hedonistas, al igual que uno. Además que, por fin, uno no se sentirá como el invitado que tiene esa extraña costumbre de no pertenecer.

pd: se que no habia contado nada....y que no tiene nada que ver con el tema...pero quede en el taller de literatura!!!..esps